Hoy estamos tristes de veras pues ha muerto alguien muy familiar, alguien cuya palabra nos acompaña desde hace muchos años, desde la universidad, desde el Nobel de 1998, desde la biblioteca personal, desde el comentario más íntimo del hogar: murió José Saramago, una de las voces predilectas y notables de nuestro sello editorial Alfaguara.. Murió, pero por entrar a nuestra vidas… no se va.
Es duro, sin duda, saber que no podremos esperar otra agudeza como El evangelio según Jesucristo, un amor más puro como el del Memorial del convento, un homenaje literario más hermoso que el de El año de la muerte de Ricardo Reis, una metáfora más irredenta que la de La balsa de piedra o una parábola de nuestra sociedad de finales del siglo XX e inicios del XXI como Ensayo sobra la ceguera…
Por eso, como homenaje a Saramago, queda abierta la invitación a quienes aún no han conocido algo de su obra, a que se animen a adentrarse en esta voz aguda, protagonista de una obra diversa y maravillosa
Fuente:Sello Editorial Alfaguara. (Vení a la Biblioteca y podrás llevar a tu casa un libro del autor
No hay comentarios:
Publicar un comentario